littlefrank

lunes, abril 25, 2011

David en la Maratón de Londres

Se dice que es el maratón mejor organizado, la capacidad del mismo es para 46.500 corredores de 80.500 que hacen solicitud y constituye el mayor evento de beneficencia realizado en un solo día. Por otra parte, es el único circuito de maratón del mundo que transcurre en dos hemisferios, en Oriente y en Occidente, ya que el tramo completo cruza el importante Meridiano de Greenwich.

La carrera comienza a las 9.45 h., excepción hecha de los corredores de elite y minusválidos, los cuales inician su andadura 45 minutos antes que los “populares”, que somos distribuidos en tres puntos de partida: los “rojos”, los “verdes” y los “azules”, alrededor de Blackheath a unos115 metrossobre el nivel del mar, al sur del río Támesis, y se dirige hacia el este a través de Charlton. Los tres recorridos convergen después de tres millas en Woolwich, donde pasa por el Cuartel dela Artillería Real“Royal Artillery Barracas”

La salida tiene lugar lejos del centro de la capital inglesa, concretamente en Greenwich Park, al lado del observatorio astronómico por el que pasa el meridiano 0. Es una explanada con césped increíblemente amplia que te da idea de la dimensión de la carrera.



Sobriedad y puntualidad británica para una salida en la que cada uno comienza perfectamente ubicado en el grupo correspondiente al color en el que se le encuadra; todos nosotros salimos del mismo grupo.

El recorrido en general no es que sea especialmente bonito; pero el numeroso público y el excepcional ambiente con multitud de bandas de música en vivo lo convierten en algo fuera de lo común, en especial en la segunda media, tras cruzar el puente de la torre, donde la aglomeración de público y los gritos de ánimo te hacían sentir un auténtico maratoniano. Para los londinenses es una auténtica fiesta y para los runners, casi, casi.

Ya desde la primera milla la gente animaba con tal fuerza que casi llegamos a parar mostrar un ohhhh, general por parte de todos los corredores, ánimos que permanecerán ya a lo largo de todo el recorrido, en el que los espectadores animan y vitorean a los atletas y es difícil encontrar un metro sin espectadores a lo largo de las 26,2 millas. contribuyendo a crear una atmósfera entusiasta y de sana competición. A lo largo de las “roads” y “streets” se organizan espectáculos con música y artistas, entreteniendo al público y recargando las pilas a los corredores.

Cada milla viene marcada con un arco gigante y un cronómetro a su par, igual ocurre cada5 kilómetros. La organización es excelente, con agua cada milla y bebida isotónica cada 5 km. con puestos de avituallamiento muy largos a ambos lados que permitían recoger las botellas sin ningún tipo de parón. Muchos voluntarios y, muchísimo; pero que muchísimo ambiente. La carrera nos regaló un día espléndido, con un agradable y aún cálido sol en contraste con el frío pasado durante las dos horas de espera en el parque Greenwich.

Los primeros kilómetros de carrera son posiblemente de lo más bonito del recorrido, partiendo del parque de Greenwich y toda su zona de influencia, la cual incluyela Greenwich Universityy otros edificios significativos. Se trata de una zona con mucha animación.

Cuando se alcanzan las seis millas, pasamos por el “Old Royal Naval Collage” y el muelle seco del Cutty Sark todavía en Greenwich y a partir de la milla 7 más o menos, la carrera se convierte un pelin tediosa en su recorrido, nunca en el ambiente porque uno no ve el momento mágico de llegar al famoso paso por Tower Bridge, el puente dela Torrede Londres, uno de los mejores momentos de la carrera. Al mismo se llega por Jamaica Road y es, sin duda, uno de los puntos donde mayor número de gente se congrega.

Atravesar el puente de la Torre de Londres (Km. 20) es toda una experiencia, al calor de un público que se agolpa durante los siguientes kilómetros con un animar incesante, ensordecedor, particularmente hasta que uno atraviesa la pancarta de “Half Marathon”, ecuador de la prueba, milla 13,1 y ya, en el tramo que comprende desde la milla 21 hasta la meta, el clamor del público continua siendo emocionante, indescriptible, verdaderamente, los londinenses saben trasmitirte ese empuje necesario: Londres, para quien no lo conozca o ya haya estado allí, es una ciudad encantadora, con muchas cosas que ver. Te pegas una paliza a andar, pero merece la pena. Las pintas de cerveza son, como todo el mundo sabe, excelentes.

En fin, volviendo a la carrera, ahora discurre camino haciala Isleof Dogs, lugar donde se ubica la parte financiera más moderna de la ciudad: Canary Wharf. Si bien la animación va “in crescendo”, mejorando por momentos, la zona de la ciudad no invita más que a atravesarla lo antes posible. Sí puede resultar curioso atravesar Canary Wharf, más sombría que nunca, a la vera de los edificios de los bancos de negocio y demás instituciones financieras.

Nada más salir de Canary Wharf – kilómetro 30 aproximadamente – uno ya va poniendo su mente en las fuerzas que quedan hasta la línea de meta, a la cual se llega tras un breve paso porla City. Antes de ello se progresa por la orilla sur del río – Southwark – hasta llegar de nuevo al punto anteriormente mencionado en Tower Bridge, desde donde se enfila la parte final de la carrera.


Como ya lo esperábamos, como antídoto al cansancio a esta altura de la carrera estaban nuestras acompañantes situadas estratégicamente sobre el Km. 37 para darnos alas hasta la meta. Para llegar al tramo final de la carrera, pasamos por la Catedralde St. Paúl en Ludgate Hill y por la Columna de Nelson en Trafalgar Square. En la penúltima milla a lo largo de “The Embankment” ya se puede ver el London Eye

A la vera de Monument comienza un ligero descenso en dirección a Embankment, vislumbrando las House of Parliament y el mítico Big Ben. En estos últimos 3-4 kilómetrosya se nos han agotado los calificativos, pero estamos ante lo verdaderamente destacable de la prueba, tanto por el recorrido en sí como por la incesante animación del público. Los últimos 3 Km. es de los mas bonito y emotivo que puedas correr, junto al Tamesis y hacia el Big Ben que, pasado, ya únicamente resta bordear Green Park para, doblando a la altura de Buckingham Palace, enfilar la línea de llegada en The Mall. La meta está situada en St.James Park justo delante de Backingham Palace. Todo un lujo de emplazamiento.

Con la vista del Big Ben de un lado y Trafalgar Square del otro, la zona de llegada está muy bien organizada, tanto para corredores como para espectadores. Después de recibir la medalla y recoger la correspondiente bolsa de bienvenida – la cual incluye una camiseta, comida y bebida – se urge a los corredores a que se dirijan a la zona de encuentro en la explanada de Horse Guards Parade donde encontrar a sus familiares y amigos.



Respecto a la carrera en sí, no es fácil hablar de la misma sin caer en la inevitable comparación con la versión neoyorquina. Nuestro grupo coincidió que estábamos ante la mejor maratón del mundo En general la impresión es que el trazado es sencillo, llano sin apenas cuestas y muy rápido. La animación parece de imposible superación ni en número ni en los decibelios de sus gargantas y la organización asimismo inatacable...

Un pero, como no, la camiseta conmemorativa es la típica blanca de propaganda, un pelin pobre que, además, te la tienes que ganar, pues te es entregada con la medalla al cruzar la meta de los42.195 m.

En cuanto a nuestra participación, todos estuvimos en línea con lo pretendido, cumpliendo cada uno en su labor de “equipo” y sobradamente nuestros dos grandísimos compañeros y amigos que se proponían hacer marca: MARIANO Y MARTA, que con 2:52 y 3:10, respectivamente consiguieron ambos el segundo puesto de los participantes españoles detrás de un tal CHEMA MARTINEZ Y de PATRICIA BONILLA,

Simplemente…… CORREDORES OSCENSES