FINDE INTENSO

Lleno estuvo de actividades el fin de semana del 10,11 y 12 de Julio. Empezando por el Viernes, día 10, cuando estuvimos presenciando el concierto de Manolo García. Nos faltó nuestro `manolín´ particular, Trallero, pero allí estuvimos con los Chevis más Carol, Alex y Ana, gente de Almudévar, y Moro, Caputo y Viñu. Tras una cena que casi nos hizo llegar tarde, Manolo García nos propuso un concierto parecido al que vimos en Octubre de 2008 en Zaragoza. Una primera media hora lenta. Destacaron “¿Quién eres tú?” de El Ultimo y “Sobre el oscuro…” que hicieron que fuese esta vez menos tediosa que aquella de Octubre. Aún así.
Fue con “Pájaros de barro” cuando se puso las pilas y ya lo dio todo. Incluyendo la vuelta al ruedo entre la gente (un clásico ya en sus conciertos). Fue entonces cuando el concierto tomó un rumbo imparable con canciones como “San Fernando”, “Si te vienes conmigo” o “Viernes”. Con “Insurrección” la plaza se vino abajo. La ranchera con la que finaliza se ha convertido también en un clásico. Buen concierto de Manolo del que hay que volver a destacar una vez más que este señor estuvo sus dos horas y media en el escenario. Aunque los primeros 30 minutos estuvo calentando.
Al día siguiente, Sábado 11, Pichi, ese gran delantero que el FS Cervantes y Álvaro tuvo en sus filas, contrajo matrimonio. El mayor detractor de Fernando Alonso que conozcamos no dejaba de sonreír en el día de su enlace. Nosotros estuvimos allí para ser testigos y disfrutar junto a él. ¡Enhorabuena Pichi y Laura!
Podríamos decir que ya desde el almuerzo la liamos parda como otras bodas, pero no esta vez. Sorprendentemente, estuvimos todos comedidos. Disfrutando pero sin excesos. Sin ningún `líder´ que mereciera recuerdo. Trabajo de equipo, je je. Como mucho, comentar el duelo de bailes de Porri con otro comensal en la barra-libre. ¡Antológico!
Tras el Domingo de descanso, Chevi y yo nos embarcamos el Lunes 13 en la enésima vez de concierto de Metallica. Para mí concretamente, la sexta. “¿Y no te cansas?” Preguntarán ustedes. Pues NO. Lo cierto es que cada uno que he visto tenía su historia. De este último guardaré un recuerdo tan bueno que pudiera colocarlo en el nº 1. El por que de tal afirmación residiría en la media docena de canciones del último disco que tocaron (y que no había escuchado aún en vivo) y en la curiosa puesta en escena que presentaban: un escenario rectángular en medio del pabellón acompañado de un muy buen juego de luces y fuegos artificiales.
La guinda a un recital de 2 horas y 20 minutos fue la lluvia de balones de playa negros con el logo del grupo, con las luces del pabellón ya encendidas, mientras efectuaban la última pieza.
P.D.: Rata: “One” , bien gracias, como siempre. jejeje