LA NOCHE DEL SABADO 14

Como parece que nadie se anima a relatar lo ocurrido el sábado pasado en esta pandilla, me permitiré la licencia de hacerlo yo, a pesar de que en una parte de la historia no estuve. Espero que esta reticencia a insertar cosas en la web sea porque aun no saben hacerlo aquellos a los que se les ha “invitado” a hacerlo. De este fin de semana no pasa que os lo explique.

Como he dicho antes, voy a relatar lo acaecido el pasado sábado llevado por la idea de las cosas que ocurren en la pandilla merecen ser comentadas en esta web que para eso está, sin tener que adentrarnos en detalles.

El caso que el pasado sábado hallábamos en el Alvicavi ya que el galego Amoedo no había abierto, por circunstancias todavía desconocidas pero que todos nos imaginamos. Era el post-partido de un encuentro muy digno disputado por nuestro club. Una parte de la pandilla (Tito con su novia, más Pelón) fueron a visitar la exposición comisariada por la hermana del primero (vayan, es interesante) para después visitar al Rata y cenar con él en su rato para tal menester. Este grupito volvió a visitar al Rata en El Edén hasta poco más de las 2 de la madrugada sin conseguir ver al resto de pandilla.

La otra parte de la pandilla, y la que merece más atención por lo que hicieron, continuaron su estancia en Alvicavi tomando sus cañitas. Llegó la hora de cenar y el trío formado por Chevi, Trallero y Alberto (el compañero de curro de Tisner) decidieron ir al Restaurante Las Torres. A tal acción se unieron David, Álex y su novia, con lo que de tres pasaron a 6, añadiendo que la hora para la cena era ya algo tarde. Para completar el grupo, apareció el señor Andrés a las copas. Se volvía a reunir Littlefranks en la misma mesa de la mítica cena del Bigote.

Al acabar la cena y con la euforia del buen comer, mejor beber y poco pagar (altruismo total del Chevi quien pagó con sus vales) unos marcharon para casa y otros se quedaron para un voltio nocturno. Andrés, David, Chevi y Trallero visitaron Edén, Komi y Cañas. En tal recorrido se desmembró el grupo bien por cansancio bien por salvaguardar la salud personal. Aquellos que quedaron volvieron a conversar animadamente con los Puertorikinis, lo que parece ya una tradición en las salidas nocturnas.A la llegada a casa de los supervivientes, a mitad madrugada, se inauguró la nueva seccion de la web, "Mairal in the night".

Viva la improvisación de esta pandilla.