PEL ON TOUR 2005: BUNBURY EN ZUERA, 26-8-05

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Decepción. Y gorda. A estas alturas todos lo sabréis ya. Nunca había vivido algo así. Cancelación de giras, sí, pero abandonos en pleno recital, no. Y además tenía que ser uno de los favoritos. Sigue alimentado su figura y su leyenda. Pero no mola y la gente no lo entiende, por mucho que sea algo que ha existido, existe y existirá en la vida del rock n´ roll. No lo estoy justificando, ni mucho menos, porque la gente que me acompañó en Zuera vieron mi cara y mi reacción al escuchar por megafonía la voz (de un borracho) que anunciaba el fin pero con reembolso del importe económico.
Aún ahora, continúa la gente hablando y el personal cercano a Bunbury, justificándolo oficialmente.
Sorpresa mayúscula fue su retirada temporal; esperanzadoras eran sus dos últimas actuaciones no canceladas, pero si tan petado o tan enfermo estaba, haber cancelado todo y así ahorrar pasajes desagradables.
Según parece, al agotamiento físico y psíquico se le unió un resfriado que desembocó en una amigdalitis. Que cada uno piense lo que quiera.
Muchos habréis leído y oído ya muchas cosas de lo que ahí pasó. Como testigo que fui, lo contaré:
Poco antes de la hora señalada, Dani Pueyo, Jorge Vera, Jeans, Meritxel, Txutxy, Laura y yo llegábamos a un pequeñote pabellón para el evento y la dimensión que había tomado. Con enorme puntualidad sonaban músicas de circo que permitían al Huracán Ambulante (D.E.P.) situarse en sus puestos bajo los focos que comenzaban a brillar. Apareció el artista, para comenzar con “La señorita hermafrodita”. Antes de “Que no sepa tu mano izquierda lo que hace la derecha” saludó a los hermanos y hermanas de Zuera y los invitó al viaje a ninguna parte. Para entonces ya se comentaba que estaba encima del escenario pero que le faltaba chispa. Nunca tan poca como para tamaño desenlace. Siguió con ”Lo que queda por vivir” y “Desmejorado” de Bushido (nunca tan al pelo). Volvió a comentar con el público alegando que “2002 y 2003 fueron años de buena pesca porque había buenos anzuelos” (que digo yo que significará que está hasta la polla).
Y llegó la quinta canción (que no la 3ª como he leído) de título “Sácame de aquí”. Sorprende que la cantara tan temprano pero se cumplió a rajatabla. En su ecuador, lanzó un beso al público y se largó por donde entró, dejando que el respetable finalizase la canción. Su, al parecer actual novia, que la teníamos al lado, salió disparada hacia el camerino. Media hora después la citada voz en off anunciaba lo peor.
Vuelta a Huesca con cara de pánfilo y gran cabreo para aguantar estoicamente la mofa de ciertos personajes.

Al amigo Bunbury: que se recupere pronto, que tenga suertecita y que no nos haga esperar demasiado. Adiós, compañero, adiós.